México representa uno de los mercados emergentes más expuestas a recibir nuevos flujos de capital, sin embargo esto representa un importante riesgo en tanto aumentan las tensiones comerciales en el mundo, señaló el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El Consejero de Asuntos Monetarios y Financieros del fondo, Tobías Adriano, esta recepción de capitales se convierte en una vulnerabilidad en medio de la persistencia actual sobre diferencias comerciales a nivel internacional y la desaceleración del sector manufacturero.
En la presentación del informe Global Financial Stability Report (GFSR), Adriano señaló que el organismo ya hizo recomendaciones precisas a las autoridades mexicanas para buscar un mayor entorno de certidumbre que les permita hacer frente a estos riesgos.
Indicó que el FMI ya ha recomendado también a México buscar una política fiscal incluyente, fortalecer el crecimiento económico, caminar hacia una política monetaria más laxa, así como promover un impulso a las empresas paraestatales.
Aseguró que “México es un mercado emergente que depende de entradas de capital que tienden a ser mas volátiles conforme se exacerba la tensión comercial. Ante esta volatilidad, es pertinente que las autoridades se encuentren en una posición sólida y reduzcan sus vulnerabilidades”.
En el informe se señala que la liquidez en el mercado mundial ha vuelto a subir, pero se convierte en un nuevo factor de vulnerabilidad para los mercados emergentes, como es el caso de México.
Por otra parte Adriano detalló que de presentarse una desaceleración mundial, la deuda corporativa podría aumentar a 19 billones de dólares, una cifra equivalente al 40% de la deuda empresarial mundial.