Abren espacio en renovables a la IP en plan eléctrico, altos costos y aún sin reglas

Tras mantener restringida a un 54% la generación eléctrica para el Estado, este miércoles la presidenta Claudia Sheinbaum presentó el plan para el sector eléctrico con una inversión total estimada para la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de 23 mil 400 millones de dólares (mdd).
Con el apoyo de Luz Elena González, nueva titular de Energía, se explicó que dicho monto será superior a los casi 20 mil mdd que se destinaron en el sexenio anterior.
Del plan dado a conocer 12 mil 300 mdd serán para generación, 7,500 mdd en transmisión y 3,600 mdd en distribución, estos dos últimos conceptos responsabilidad exclusiva del Estado.
El aumento a estos dos conceptos es consistente con las necesidades que hay, puesto que durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, sólo el 25% del presupuesto total de CFE se destinó a mejorar esa infraestructura, situación que ha motivado apagones en distintas partes del país.
En el plan se abrió espacio para la participación del sector privado en lo que es la generación de energía renovable, para que pueda generar entre 6,400 y 9,550 MW con una inversión que supondrá entre 6 mil y 9 mil mdd.
Claro que falta conocer las reglas para que las empresas puedan participar, máxime que el despacho volverá a ser controlado por la CFE, y que además se exigirán baterías en los proyectos eólicos y solares, para que haya continuidad en el suministro eléctrico, situación que encarecerá los costos.
Además los particulares deberán comprometerse a contribuir al desarrollo local y cumplir con los principios de justicia y legalidad de los tenedores de tierra y agua.
Para la opción de páneles en techo que se utilizan en pequeñas empresas y casas habitación, y que no requieren de un permiso, se elevará el umbral de 500 a 700 kilowats.
Para aquellas empresas que operan bajo la figura de autoabasto, para generar su propia energía en sitio, se deberá estar al corriente de los permisos, más allá de los amparos interpuestos durante el sexenio pasado.
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) consideró que el plan eléctrico es una buena noticia, pero que los montos estimados son insuficientes, máxime el rezago acumulado en los últimos seis años, sobre todo en transmisión y distribución, lo que ha generado cuellos de botella en algunas zonas del país como Yucatán y Monterrey.
Otros expertos estimaron además que la participación del sector privado podría venir a cuenta gotas, máxime las nuevas reglas que implicarán un mayor costo operativo sin garantizar un buen retorno de la inversión. Además está la falta de certidumbre a la inversión por la reciente reforma al Poder Judicial.