A United Airlines le costó caro el incidente difundido por las redes sociales, en el que un pasajero de origen chino fue tratado con violencia para obligarlo a descender de un vuelo sobrevendido.
Las acciones de la aerolínea se desplomaron en los primeros minutos de la sesión en Wall Street 6.3%, aunque lograron recuperarse un poco y el derrumbe solo fue de 3.21%.
Pero las consecuencias no se limitaron a la pérdida del valor de sus títulos, sino también en su popularidad e imagen, pues ahora se enfrenta a una fuerte amenaza de boicot que cobra fama en redes sociales, referente a que el público deje de comprar pasajes en United Airlines.
El tema de la expulsión del pasajero, que no incurrió en ninguna falta y que solo fue elegido al azar por la compañía para dejar el vuelo porque fue sobrevendido, se convirtió tendencia mundial y también una pesadilla de relaciones públicas para la aerolínea.
Ello a pesar de que la empresa explicó que su personal de vuelo tomó la acción porque necesitaba hacer espacio a miembros de la tripulación.
El lunes, el director general de United, Oscar Munoz, pidió disculpas en una declaración pública por "tener que acomodar a estos clientes". Además, aseguró que la aerolínea trata de resolver el asunto con el hombre perjudicado.
El incidente es un tema obligado de debate en publicaciones y medios sociales en China.
En Estados Unidos, la empresa ya es víctima de parodias de distintos comediantes como Conan O’Brien, quien recientemente vino a hacer un programa a México en apoyo a la población nacional después de las declaraciones de Donald Trump sobre la edificación del muro fronterizo y en el show de Jimmy Kimmel, el anfitrión de la última edición de la entrega de los Premios Óscar.