Juan Pablo Castañón, presidente del CCE, afirmó que la cancelación del proyecto actual significaría una pérdida de 120 mil millones de pesos.
Se informó que una tercera parte de este monto sería por penalizaciones debido a la cancelacio´n de contratos.
"El costo de suspensión en términos financieros y de tiempo es extremadamente alto en cualquier fase. Adicionalmente, se retrasaría la solución a la saturación del AICM que limita la generación de beneficios para la población mexicana", señaló el presidente del CCE.
Además mantenerlo en Texto, agregó, garantiza la operación para los próximos 50 años .
El CCE se mostró de acuerdo con continuar la obra del NAIM y revisar los costos de materiales siempre y cuando no quede comprometida la funcionalidad de aeropuerto. Lo mismo que en revisar el esquema de financiamiento mediante la bursatilización de la deuda y aumentar el alcance social del proyecto a través de zonas de alto impacto, desarrollo y generación de empleos en los municipios aledaños que son zonas de alta marginación.
"No queremos un aeropuerto suntuoso, pero sí funcional para el desarrollo de la aviación y el transporte de pasajeros en los próximos 50 años", puntualizó el propio Castañón