Aumentar la deuda pública, establecer un Consejo de Emergencia Económica y la realización de más pruebas para el COVID-19 en la reapertura, entre las propuestas del Acuerdo Nacional del CCE

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) reiteró su llamado a que el gobierno aumente la deuda pública para apoyar a las empresas a mantener el empleo, la creación de un Consejo de Emergencia Económica, al tiempo que también solicitó se reoriente el gasto público para atender la crisis económica generada por la pandemia del COVID-19.
En la presentación de las conclusiones de la Conferencia Nacional para la Recuperación Económica, Carlos Salazar, presidente del CCE, presentó 10 conclusiones generales que agrupan las 68 ideas para la reactivación económica y la protección del empleo, las cuales son el resultado de las diferentes mesas que se reailzaron los últimos días con expertos a través de todo el país.
En la presentación el propio Salazar Lomelín aseveró que “todos, absolutamente todos queremos, incluso personas con visiones ideológicamente distintas a las que defiende el sector empresarial, que el país debe tomar una mayor deuda pública para la reactivación económica. La deuda por la misma crisis va a crecer. Si ya tenemos una deuda con respecto del PIB creciente, creemos todos que deberíamos de tomar deuda de forma responsable y utilizarla para apoyar a las familias mexicanas”.
El CCE hizo ver que existe el interés común de:
 
1.-Cuidar la salud y para ello es necesario “contar con servicios de salud de calidad y con los insumos necesarios para responder a la pandemia” lo que incluye aumentar la disponibilidad y aplicación de pruebas para identificar oportunamente la magnitud del problema y detonar acciones de mitigación apropiadas, al tiempo se pide “promover mayor eficiencia en la Comisión de Autorización Sanitaria de la COFEPRIS y de INDRE para agilizar la autorización de insumos de salud necesarios durante la crisis”.
 
2.-Proteger a las poblaciones más vulnerables, detonando programas específicos para darles los recursos necesarios para sobrellevar la crisis sanitaria y económica.
 
3.- Minimizar el impacto de la crisis económica tomando medidas que apoyen la sostenibilidad de las empresas y garanticen la continuidad de las cadenas de valor. Para ello se solicita el que las empresas mantengan el apoyo “a sus proveedores incluyendo medidas como acceso a financiamientos, flexibilización de las condiciones de pago para evitar caer en mora, apoyo a arrendatarios y transferencias de conocimientos y capacitaciones para alcanzar mayor eficiencia operativa”. Además de instalar un Consejo de Emergencia Económica y fortalecer “el tripartismo y diseñar una política incluyente de preservación del empleo implementando programas de flexibilización de las jornadas laborales u horarios escalonados de trabajo”.
 
4.-Acelerar la devolución del IVA.
 
5.- Postergar obligaciones y modificaciones legales y normativas que incrementen los costos para las empresas.
 
6.- Diferir las obligaciones fiscales de corto plazo por un periodo concreto, para incrementar la liquidez de las empresas.
 
7.- Inyectar liquidez a la economía y mantener la sostenibilidad fiscal. Para ello se propone incrementar la deuda en un rango de 0.5% hasta el 5% del PIB para sufragar gasto en salud, mantener e incrementar los programas sociales y sentar bases para la reactivación económica, lo que “reducirá en el futuro la proporción de la deuda al PIB”. Asimismo se busca el que se aprovechen las “líneas de crédito disponibles ante organismos multilaterales para inyectar liquidez en la economía en el corto plazo”.
 
8.-Que la salud de la población sea “la principal prioridad” en la reapertura de la economía. Con ese objetivo “deben crearse los mecanismos necesarios para salvaguardarla” para ello es importante, se argumentó, apropagación una vez que se reabra la economía, incluyendo unidades móviles y pruebas aleatorias.
 
9.-Establecer acciones de mediano y largo plazo para la reactivación de la economía.