Los maestros falsos le cuestan al erario más de 35 mil millones de pesos anuales, de acuerdo con cifras de Mexicanos Primero.
En su Abusómetro, que mide la cantidad de dinero que se desvía del sector público para pagar a los maestros que no existen, y que empezó a correr el 17 de agosto de 2016, la Organización No Gubernamental detalló que desde ese momento a la fecha se perdieron casi 95 mil 300 millones de pesos en pagos injustificados.
De acuerdo con el Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos en Educación Básica y Especial (CEMABE) estos pagos se destinan a casi 300 mil personas que cobran como maestros pero que no dan clases.
El CEMABE reveló que de estos 300 mil docentes sin derecho a cobro 13% son aviadores, es decir, “profes” que sólo van a la escuela por el cheque, pero no dan clases, mientras que 10% son comisionados -personas que cobran sueldo de maestro sin dar clase y que ocupan puestos administrativos, sindicales o de otro tipo-.
Además, 38% están “dando clases en otro lado”, pero nunca nadie los conoce, al tiempo que el 39% restante cobra por otros profesores (retirados, jubilados, e incluso fallecidos).