Conforme a la expectativa del mercado la Junta de Gobierno del Banco de México (BANXICO) tomó la decisión de mantener sin cambio la tasa de interés interbancaria en un nivel de 7%.
El banco central tomó como base varios elementos, entre ellos la evolución de la actividad económica mundial durante el segundo trimestre, y en particular de Estados Unidos (EU).
Además la Reserva Federal (FEC) de ese país también mantuvo sin cambio sus tasas, dado que la inflación se ubica por debajo del objetivo del 2%.
BANXICO consideró sin embargo que dado el crecimiento económico moderado estadounidense y el buen dinamismo del mercado laboral, la FED pudiera incrementar su tasa de referencia en su reunión de diciembre.
Para lo que es 2018 y años subsecuentes se explicó que los mercados esperan aumentos moderados y graduales de las tasas de fondos federales, o sea que se mantiene una perspectiva de políticas monetarias acomodaticias en el futuro inmediato, tornándose poco a poco a neutrales en particular en lo que respecta al Banco Central Europeo (BCE).
En el análisis del banco central se explica que las economías emergentes también muestran cierta recuperación, beneficiándose de las condiciones financieras globales benignas.
No es el caso de China que apunta a una leve desaceleración de su actividad.
Por lo que hace a la economía mexicana se consideró que se expandió en el segundo trimestre a un ritmo mejor al previsto, en particular la demanda externa, ya que el consumo privado exhibió una desaceleración y prevalece la debilidad de la inversión.
Además se insiste en que la economía mexicana aún enfrenta un entorno complejo frente a lo cual es importante que las autoridades financieras perseveren en mantener fuertes los fundamentos macroeconómicos, consolidándose las finanzas públicas y la convergencia de la inflación a su objetivo.
Justo respecto a la inflación BANXICO destacó que aún refleja un aumento transitorio y que en los próximos meses la tasa anual se mantendrá por encima del 6% acercándose poco a poco a su techo.