“Con más de 176 mil millones de dólares de reservas internacionales el Banco de México tiene la capacidad de seguir con intervenciones en el mercado cambiario” para tratar de contener la depreciación del peso frente al dólar, señaló Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de Banco Base.
Destacó que no existe una receta ni teoría económica de cómo se tiene que intervenir el mercado cambiario porque su flujo es inmenso. Y es que de acuerdo con cifras del Banco Internacional de Pagos, cada día se hacen operaciones en pesos por un monto equivalente a 112 mil millones de dólares; sin embargo, las intervenciones del Banco de México en lo que va del año han sido adecuadas.
La primera fue el 5 de enero por un monto estimado de mil millones de dólares, aunque la cifra exacta no fue publicada por el banco central. La segunda intervención ocurrió el 6 de enero en el mercado asiático, por un estimado de 200 millones de dólares.
Las reservas internacionales del país, que ayudan al Banco de México a mantener el poder adquisitivo de la divisa y al buen funcionamiento de la política monetaria, cerraron 2016 en 176 mil 542 millones de dólares y aunque se ubicaron en niveles similares a los de 2013, son suficientes para que Banxico pueda contener la depreciación del peso frente al dólar.
Siller destacó que en 1994, después del asesinato del entonces candidato priísta a la presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio, las reservas llegaron a un mínimo de seis mil millones de dólares, cifra con la que el Banco de México no podía respaldar el valor del peso, hoy en cambió aseveró que el saldo actual permite realizar subastas que envían mensajes de calma al mercado cambiario, lo que es positivo.
El 1 de enero del 2010, cuando Agustín Carstens asumió el cargo como gobernador de Banxico, en sucesión de Guillermo Ortíz, las reservas internacionales mostraron un saldo de 90 mil 838 millones de dólares, mismo que aumentó en 85 mil 704 millones hasta el último saldo reportado al cierre de diciembre.
Las reservas internacionales operan con pesos, pero están compuestas por varias monedas y metales se calculan en dólares y de acuerdo a las cotizaciones internacionales de cada valor. Por esta razón, su fluctuación es variable.
No se consideran un ahorro del Gobierno, porque no se pueden invertir, es como un dinero guardado que da confianza a los inversionistas y que se utiliza cuando es necesario, como para contener la depreciación del peso frente al dólar, así que es posible que el banco central siga con las intervenciones en el mercado de cambios.