El Producto Interno Bruto de la actividad económica del país registró durante el tercer trimestre del año una contracción anual del 0.4%, mucho más pronunciada que la expectativa del mercado que estaba en 0.0%.
El dato con cifra originales que dio a conocer el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) confirma que la economía se encuentra en recesión, tras de que en el trimestre previo el PIB cayó 0.8%.
El comportamiento del PIB se explica por una caída del 1.8% del sector industrial y un comportamiento neutro, o sea del 0% de la rama de servicios vinculada con el consumo de país.
Sólo las actividades primarias ligadas con la actividad agropecuaria y pesquera crecieron 5.3%, aunque cabe recordar que este componente tiene un peso muy limitado en el producto nacional.
Conforme al reporte oportuno del INEGI durante los primeros 9 meses del año la economía de México se ha mantenido estancada en 0%, en tanto que la industria muestra una caída del 1.8% tras de 10 meses consecutivos de retrocesos, mientras que la rama de servicios, otrora soporte de la actividad, apenas ha crecido 0.6%. Las actividades primarias han avanzado a su vez en ese periodo 4.2%.
El estancamiento económico tiene que ver con la incertidumbre que han generado las políticas públicas de la presente administración lo que ha impactado el ritmo de la inversión y ha debilitado el consumo.
Para lo que resta del año, los expertos no estiman ningún repunte y es altamente probable que vuelvan a ajustarse las estimaciones para el 2020.