La mayoría de los miembros de la Junta de Gobierno de Banco de México (BANXICO) considera que debido a un entorno complejo que presenta actualmente la economía del país el balance para su crecimiento tiene aún un balance sesgado hacia la baja además de que consideran que la trayectoria esperada para la inflación mantiene una inclinación hacia la alza.
De acuerdo con la minuta de la última reunión monetria del banco central también se considera como preocupación el entorno comercial.
Los miembos de la junta de gobierno destacaron la incertidumbre sobre la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y el futuro de la relación bilateral con Estados Unidos.
Algunos apuntaron que si bien recientemente se han observado señales positivas sobre el rumbo de las conversaciones del tratado comercial, los riesgos de una negociación prolongada o de un resultado desfavorable no han desaparecido, lo que puede repercutir en las inversiones.
Como un contratiempo adicional, agregaron la posibilidad de que la plataforma de producción petrolera continúe significativamente por debajo de lo programado en lo que resta de 2018.
Asimismo consideraron como un factor de incertidumbre las estrategias, políticas y planes que llevará a cabo la nueva administración gubernamental.
Al respecto, argumentaron que la falta de detalles acerca de las acciones que tomará el nuevo gobierno en diversos ámbitos también acarrea riesgos para la evolución de la demanda interna en la segunda mitad de 2018 y en 2019.
La mayoría de los miembros de la junta de BANXICO destacaron que las expectativas de inflación general para el cierre de 2018 tuvieron un ajuste de 4% a 4.25%, mientras que las correspondientes al cierre de 2019 se mantuvieron alrededor de 3.60%, que está por encima de la meta del instituto para este año.