De acuerdo con datos del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF) los inversionistas foráneos en México mantuvieron sus posiciones en México durante el primer trimestre del año y generaron la entrada de 4 mil 800 millones de dólares.
El IFF explicó que este es un flujo que casi duplicó el captado por esta misma vía en el último trimestre del año.
El organismo señaló que esto es una reacción al contexto internacional con la guerra comercial entre Estados Unidos y China además de la liquidez disponible en el mercado ante la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) de dejar sin cambio la tasa, así como por las condiciones internas de México.
No obstante hace ver que además la mayor tasa de México no sólo es un sobreprecio para el inversionista, sino que es también una señal de alerta, que se suma al diagnóstico sobre el mercado, relacionado básicamente por el cambio de gobierno y la situación financiera de Petróleos Mexicanos (PEMEX), que son factores que han impactado en el ánimo del inversionista extranjero que aún busca al mercado mexicano, pero tiene cautela.
Reconoce también que PEMEX ha afectado el sentimiento de los inversionistas sobre México y fue evidente en febrero, cuando las calificadoras hicieron señalamientos sobre su viabilidad financiera.