El Banco de México informó que le crédito al consumo creció 4.9% anual durante abril, lo que representó su tasa más baja en casi dos años.
La disminución en el ritmo de crecimiento ocurrió a pesar de que en ese mes se festejó la Semana Santa, lo que favoreció al uso de las tarjetas de crédito, aunque el repunte en los plásticos no fue suficiente para compensar el menor dinamismo en los créditos de nómina y los personales.
En el último año la cartera de crédito de plásticos aumentó 3.6%, por encima del dato de 2.9% reportado en marzo y con el que el segmento tocó su crecimiento más bajo en poco más de un año.
Por otra parte, la demanda de créditos de nómina subió apenas 2.5%, la más baja en la historia de la serie, disponible a partir de febrero de 2012.
Además, los créditos personales mantuvieron una tendencia de menor crecimiento con una variación de 7.4%, la más baja desde septiembre de hace dos años.
Pese a recuperación en confianza de los consumidores, la inflación y la incertidumbre que aún persiste sobre el rumbo de la economía daña las decisiones de compra de largo plazo.
Con ello, el crédito para la adquisición de bienes de consumo duradero observó una leve moderación a una tasa de 14.8%, la más baja desde el inicio de año.
El financiamiento automotriz subió 14.2%, mientras que el otorgado para las compras de bienes muebles, como electrodomésticos aumentó 21.2%.