En la construcción de la Plaza Artz Pedregal en la Ciudad de México (CDMX) que recientemente se colapsó, no se consideró que debería soportar carga adicional, de ahí el derrumbe que ocurrió de la estructura.
El dueño de la plaza, en este caso Grupo Sordo Madaleno, informó que luego de este suceso mandó realizar tres peritajes independientes, los cuales arrojaron que el grave incidente se debió a un error en el cálculo estructural de la construcción desde su origen.
Los peritajes fueron realizados por el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la firma estadounidense Wiss Janney & Elstner (WJE) y la empresa Stark + Ortiz.
La UNAM consideró que la capacidad de los elementos estructurales no fue suficiente para soportar la combinación de cargas gravitacionales.
Los dictámenes de los expertos señalan que los valores de carga “indican un diseño significativamente deficiente en términos de resistencia y que puede representar un riesgo de seguridad durante la construcción cuando la edificación está soportando esencialmente su propio peso".
La empresa Stark+Ortiz SC indicó por su parte que la combinación de cargas gravitacionales y las trabes eran insuficientes para soportar las solicitudes de diseño.
Grupo Sordo Madaleno señaló que a pesar de todo, se cumplió con todos los procedimientos correspondientes que exige la normatividad de la Ciudad de México, (CDMX).
Hay que señalar que esta empresa informó que ya ha compartido con las autoridades de la CDMX estos tres estudios, además de toda la información requerida para el peritaje oficial.