08 noviembre 2016.- Finalmente llegó una de las jornadas más esperadas de los últimos meses, el día de las elecciones presidenciales en EU.
En los últimos días las posibilidades de triunfo del candidato republicano se disiparon luego de que las investigaciones del FBI exonerarán a la demócrata Hillary Clinton.
De momento Clinton tiene una probabilidad de triunfo del 70%, por arriba del 64% que tenía la noche del domingo.
De igual forma datos del portal especializado en encuestas FiveThirtyEight dejan ver que su oportunidad de obtener el voto popular aumentó del 2.9% a 3.5%.
Ayer las intenciones de voto de estados clave como Nevada, Carolina del Norte y Florida cambiaron a manos de los demócratas. Las proyecciones actuales muestran que Clinton tiene una posibilidad del 54% de ser elegida en Florida entidad con un peso de 29 votos electorales, a su vez Carolina del Norte significa otros 15 votos y Nevada 6.
¿Y si lo peor sucede?
Sin embargo, más allá de las encuestas en la mente de muchos aún persiste la duda sobre qué pasaría si Trump fuera elegido como el próximo presidente de la principal economía del mundo.
Hasta ahora la retórica de ese candidato ha sido antimigratoria y a favor de un mayor proteccionismo comercial.
En más de una ocasión ha expresado su desacuerdo con el tratado de libre comercio con México y Canadá. Situación preocupante, pues hoy el TLCAN establece que cualquier miembro puede romper este acuerdo luego de una notificación a los otros miembros con seis meses de anticipación.
Para México la estocada sería mortal pues nuestro PIB depende en 25% de las exportaciones y el 75% de ellas tienen como destino EU.
Realidades paralelas
Es por ello que lo que suceda hoy será determinante en la trayectoria de nuestra economía.
Gabriela Siller economista en jefe de Banco Base enfatiza que de ganar Clinton el país podría cerrar el 2017 con un avance del 2.5%, un tipo de cambio de 18.30 pesos por dólar y una tasa de interés del 5.75%.
Sin embargo si Trump toma la delantera en la votación de hoy, el país sufriría una caída económica cercana al 3%, un incremento del tipo de cambio de 24 pesos por dólar dada la incertidumbre y un alza de la tasa de Banxico del 7% a fin de mantener controlada la inflación y amortiguar la salida de capitales.