Los ciudadanos de la Unión Europea (UE) dejarán de pagar el roaming siempre y cuando se trasladen dentro de cualquier país del bloque económico.
El cambio ocurrió después de 13 años de negociaciones entre la UE y los operadores y es válido para las llamadas y la conexión a internet, aunque lleva dos años de implementación por parte de la adaptación de tuvieron que hacer las compañías telefónicas.
"La eliminación del roaming es uno de los mayores y más tangibles éxitos de la UE. Muestra cómo la UE puede unir a las personas y facilitar sus vidas", afirmaron en un comunicado conjunto los presidentes de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, y del Parlamento Europeo, Antonio Tajani.
La declaración también está firmada por el primer ministro de Malta, Joseph Muscat, cuyo país ejerce la presidencia semestral de la UE.
Además, la Comisión Europea prometió vigilar el respeto de las nuevas reglas para “asegurarse de que los ciudadanos se benefician totalmente de ellas”.
También estableció regulaciones para prevenir el abuso de parte de usuarios, como la contratación de un plan telefónico en un país extranjero donde los costos sean más bajos.
Las empresas de telefonía podrán pedir a los clientes datos que comprueben que realmente viven en dicho país, así como solicitar explicaciones a quienes pasen más de cuatro meses fuera del país donde se suscribió el contrato.