Este martes, diferentes presidentes de la Reserva Federal (FED) reiteraron en foros distintos que frenar los precios más altos en casi 40 años era su prioridad, lo que reforzó las palabras del presidente del organismo Jerome Powell en la reunión de bancos centrales en Jackson Hole, Wyomming.
Al retomar la declaraciones del fin de semana, los funcionarios de la Reserva Federal enfatizaron su compromiso para detener la inflación mientras mantienen la incertidumbre respecto a la magnitud del alza a la tasa de interés del próximo mes.
El jefe de la FED de NY, John Williams indicó que las tasas de interés probablemente necesiten situarse sobre 3.5% en algún momento para lograr su objetivo.
Durante una entrevista virtual con el Wall Street Journal agregó que “necesitamos llegar ligeramente o un poco más allá de eso, porque no sólo se trata de llegar a neutral, sino también se trata de que la demanda vuelva a estar en línea con la oferta”.
Además rechazó las apuestas del mercado en el que el sentido de que la FED reducirá las tasas el próximo año, y advirtió que habría que esperar algo de tiempo antes de ver ajustes de tasas a la baja.
Como se recordará que el presidente de la FED, Powell y sus colegas han advertido a los inversionistas su determinación de aumentar las tasas de interés hasta que la inflación ceda terreno.
De hecho Williams, un miembro clave del equipo principal de la institución, señaló que los recientes datos de inflación eran alentadores, pero que los precios aún suben demasiado rápido mientras que el mercado laboral se mantenía fuerte. Lo que se interpretó como que la FED necesita impulsar las tasas a un nivel que sea “restrictivo”, lo que significa que frena a la economía.