La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) señaló que no habrá ninguna modificación al esquema de precios de combustibles en 2017, pues cualquier tipo de incentivo sería regresivo, pues beneficiaría a las familias de mayores recursos y dañaría al medio ambiente.
“Cualquier apoyo a combustibles tiende a ser altamente regresivo con el uso muy concentrado en los hogares de mayores ingresos, donde cerca del 30% de los hogares de mayores ingresos concentran 70% del consumo. Y en ese sentido pues no se consideraba que fuera una buena medida de política pública el que se estuviera manteniendo un precio artificialmente bajo para los combustibles”, mencionó Miguel Messmacher Linartas, subsecretario de Ingresos de la dependencia en una conferencia de prensa con corresponsales internacionales.
El funcionario señaló que el proceso no es nuevo, pues se inició en 2015, cuando se mantuvo congelado el precio, mientras que en 2016 se estableció una banda de precios máximos y mínimos, en la que el valor del petrolífero se ajustó acorde con las referencias internacionales.
“En 2017, realmente lo que estamos viendo es la continuación de este proceso donde pues desafortunadamente coincide con un incremento relevante en los precios internacionales del petróleo, básicamente por un aumento en los precios del WTI y del Brent, de los distintos marcadores, asociado a la restricción que hizo la OPEP en cuanto a niveles de producción en cuanto a una participación muy importante de Arabia Saudita, pero también de Irak, de Irán y de Rusia”, abundó.
Por ello, el funcionario refirió que el incremento de las gasolinas se debe principalmente a una transferencia de precios internacionales del petróleo, debido a que el hidrocarburo es el principal insumo en la elaboración del combustible.