La apertura de la embajada de Estados Unidos en Jerusalén ocasionó fuertes protestas y agresiones que dejaron un saldo de al menos 52 muertos y 2 mil 200 heridos por enfrentamientos en la frontera entre Gaza e Israel.
La decisión de Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel ha desatado la furia de los palestinos, quienes se han concentrado para expresar su rechazo a una de las promesas del presidente estadounidense desde su campaña.
A la apertura de la embajada en Arnona asistieron el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, la hija del presidente estadounidense, Ivanka Trump, así como su yerno y consejero presidencial, Jared Kushner.
De acuerdo con las Fuerzas de Defensa de Israel alrededor de 35 mil manifestantes se congregaron en la valla fronteriza. Según el jefe del servicio de noticias extranjeras del diario Haaretz, Asaf Ronel, entre los manifestantes que han resultado heridos hay 74 menores, 23 mujeres y 8 periodistas.
En un comunicado el servicio secreto israelí señaló que “de acuerdo a nuestras informaciones y sus propias declaraciones, el grupo terrorista Hamás intenta llevar a cabo una serie de ataques incluyendo una masiva infiltración en numerosos puntos para atacar a ciudadanos y soldados israelíes”.
También se sabe que la policía israelí detuvo un autobús lleno de manifestantes procedentes de Jerusalén, cerca de la Puerta de Damasco, en la Ciudad Vieja. Según los informes, el autobús se dirigía a la ceremonia de inauguración de la embajada estadounidense.