Miembros de la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (AMELAF) presentarán amparos en contra del proceso de compra consolidada de fármacos del gobierno federal que será internacional, pues consideran que primero debió haberse realizado una convocatoria nacional.
“La asociación no procederá legalmente como tal, pero sí tenemos agremiados que definitivamente buscarán hacer valer sus derechos a través del juicio de amparo” aseguró Arturo Morales, presidente del organismo privado representante de 40 empresas mexicanas fabricantes de medicamentos genéricos.
AMELAF advirtió que con esta licitación se vulneran los derechos de los productores nacionales y se violan de igual forma los de aquellos países con los que México tiene acuerdos comerciales.
Señaló además que la competencia es sana, pero en estos momentos la industria local no está en condiciones de soportar el producto desleal que pudiera venir de países como China e India que gozan de subsidios públicos para la exportación.
El gobierno ha señalado que en esta ocasión la compra se hará desde el principio a través de una licitación pública internacional con el objeto de tener una mayor convocatoria de proveedores, mayor competencia y mejores precios.
Hay que recordar que anteriormente este tipo de compras se realizaban primero bajo una licitación nacional, y si era declarada desierta, entonces se hacía una internacional bajo tratados internacionales en donde se daba preferencia a los socios de México.
Morales indicó que “hay laboratorios mexicanos altamente vulnerables a esta política de ahorros, pues hasta 90% de sus ventas las hacen al gobierno”.
Añadió que “nosotros no pedimos subsidios, sino una cancha pareja para competir”, afirmó Morales.
El representante empresarial hizo un llamado al gobierno para ponderar la importancia de promover una industria farmacéutica nacional desde los puntos de vista económico y de seguridad nacional. “Generamos empleos bien pagados y somos una industria estratégica por su importancia para la salud pública”.
Entre 30% y 40% del gasto público en medicamentos se destina a la compra de genéricos, que representan entre 60% y 70% de las piezas adquiridas por el gobierno.
La AMELAF no descartó que, a pesar de la licitación internacional, la subasta de algunas claves de compra pueda quedar desierta debido a los bajos precios de referencia que planteó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el poco tiempo para planear producción con el que contaron los proveedores.