Los precios al consumidor de Estados Unidos se contrajeron 0.1% mensual en mayo, debido a una disminución en el costo de la gasolina.
Este resultado reforzaría una perspectiva de menores alzas en la tasa de interés referencial de la Reserva Federal en lo que resta del año.
El Departamento del Trabajo señaló que su índice de precios al consumidor que esta es la segunda baja en el indicador en tres meses y podría preocupar a los integrantes del banco central estadounidense, que consideraban la debilidad en la inflación como transitoria.
En los 12 meses hasta mayo, el IPC subió 1.9%, el menor incremento anual desde noviembre y tras un avance de 2.2% en la medición a abril.
Analistas consultados por Bloomberg y Reuters pronosticaron un incremento en los precios de 2% anual para el lapso de referencia, dato ligeramente superior al reportado en mayo pasado.