Los precios al consumidor subieron 5.35% hasta el cierre de marzo pasado, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El resultado fue consecuencia del incremento en las presiones derivadas de los precios de los energéticos, así como de las mercancías alimenticias y no alimenticias.
La inflación subyacente del índice, que incluye los precios de los bienes y servicios de consumo menos volátiles repuntó a 4.48%.
El total de mercancías apuntó un aumento de 5.85% anual y en los servicios se ubicó en 3.32%
El componente no subyacente registró un aumento de 8.02%, debido a que los agropecuarios subieron 1.02%.
Finalmente, los energéticos y tarifas no autorizadas por el Gobierno tuvo un incremento de 12.56% anual.