Una jueza de Estados Unidos confirmó que Apple infringió una patente de Qualcomm que permite ampliar la duración de la batería de los smartphones.
Ya hace tiempo Qualcomm abrió este caso ante la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, donde argumentó que Apple usaba dos patentes de su tecnología específicamente en los iPhone que tienen procesador Intel, una de las cuales es para acelerar la conexión a Internet y otra para ahorrar la batería de los dispositivos.
MaryJoan McNamara, jueza de la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, concluyó que “los dispositivos móviles de Apple que son fabricados en China deberían prohibirse en Estados Unidos ya que la empresa infringió la patente relacionada con ahorro de energía”.
La queja original sobre esta patente tiene que ver con el iPhone 7 y al modelo 7 Plus, pero no queda claro si la importación de otros modelos podrían verse afectados.
Don Rosberg, que es asesor general de Qualcomm indicó que en la empresa agradece a la jueza el haber reconocido la infracción de la patente de hardware por parte de Apple y la recomendación de la prohibición.
Por otra parte Apple señala que no infringió la patente y afirma que Qualcomm con sus reclamos trata de excluir del mercado a su único competidor con sede en Estados Unidos.
Apenas el 15 de marzo un jurado determinó que Apple debe pagar a Qualcomm 31 millones de dólares como indemnización por infringir patentes de tecnología.