La liberación del precio de la gasolina provocará que el combustible cambie su costo final en tiempo real, por lo que la Comisión Reguladora de Energía deberá vigilar las condiciones de competencia e infraestructura antes de determinar dónde aplicará el nuevo esquema sin afectar a los consumidores, señaló la Cofece.
En una opinión emitida al regulador energético, la Cofece señaló que el esquema de precios incluye el valor del combustible en el mercado nacional o en el mercado de referencia, la disponibilidad del transporte, almacenamiento y distribución, así como el nivel real de los impuestos y las condiciones de competencia en la venta de gasolinas.
Por ello, una vez que se implemente el nuevo esquema “es predecible” que los precios se moverán en tiempo real, por lo que para evitar afectaciones a la población la CRE deberá vigilar las condiciones de las regiones en las que decida liberar el mercado.
Para alcanzar un mercado con competencia efectiva, la Cofece señaló que es necesario incrementar la capacidad operativa de las refinerías nacionales (que actualmente trabajan a 20% de su potencial), mejorar los medios de transporte disponibles y el mercado de mayoreo.
Además, los mercados deben garantizar opciones de suministro estable y eficiente para cubrir la demanda, a través de la compra de gasolina nacional o su importación, así como tener acceso a toda la infraestructura necesaria para transportar el combustible desde las terminales de almacenamiento.
Una vez que analice estos factores, la CRE deberá revisar la estimación de los diferenciales de costos de abasto por región, lo que permitirá identificar el avance en la madurez de cada zona y detectar irregularidades en los precios finales.