Conforme a las expectativas de los expertos y más allá de la agresiva política monetaria implementada por BANXICO, la tasa de inflación anual de junio se situó en 6.31%, según el reporte del INEGI.
En el sexto mes del año el incremento fue de 0.25% cuando en el mismo mes del año anterior el avance fue de 0.11% y la variación anual se situaba en 2.54%.
De acuerdo al reporte el Índice de Precios Subyacente que incluye aquellos productos que tienen variaciones temporales, aumentó en junio 0.30% y la tasa anual se situó en 4.83%.
Sin embargo el Índice de Precios No Subyacente que tuvo un alza mensual de 0.09% trepó en el cálculo anual a 11.09%.
En la variación anual hasta junio del Índice Subyacente, alimentos, bebidas y tabaco influyeron con un 6.9%, las no alimenticias 5.86%, servicios 3.6%, vivienda 2.57% y colegiaturas 4.37%.
En lo que es el Índice No Subyacente el golpe más fuerte se recibió en energéticos con un alza del 15.20%, seguidos de frutas y verduras con un 13.69% y las tarifas autorizadas por el gobierno 8.85%.
De acuerdo a los especialistas se estima todavía en julio y quizá agosto se mantendrán las presiones inflacionarias en la economía para suavizarse las alzas hacia finales del año como resultado de los incrementos de las tasas de interés por BANXICO.