La primera jornada hábil de la semana en México fue marcada por una nueva encuesta de Especialistas del Sector Privado, hecha por el Banco de México, uno de los termómetros más importantes para el futuro económico hacia el cierre del año.
En esta ocasión, el documento nos dejó lo bueno y lo feo, pues para los expertos la economía crecerá más de lo esperado, mientras que el dólar acabará en niveles más bajos a los previstos al inicio del año.
Sin embargo, la expectativa de la inflación sigue al alza, lo que quiere decir que nuestro salario alcanzará para mucho menos de lo que teníamos planeado.
LO BUENO
Después de cuatro meses de que los economistas encuestados por el Banxico dejaron la expectativa de crecimiento económico en 1.49%, ayer por la mañana pusieron la vara más alta, pues hay una disminución en la incertidumbre (por ahora) sobre el país, lo que impulsaría al PIB a 1.66% hacia el cierre del año, aunque se mantiene muy lejos del 4% prometido al inicio del sexenio por el presidente Enrique Peña Nieto.
Además, después de los disparates en el mercado cambiario, la expectativa de los especialistas también fortaleció a un vapuleado peso, pues el dólar al mayoreo, léase el que se vende entre bancos, cerraría en 19.75 pesos, desde 20.15 del estimado previo.
La explicación es la misma, menor incertidumbre sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y un ligero optimismo sobre la relación que mantendrá México en el corto plazo con Estados Unidos.
LO MALO
Del otro lado de la frontera, las automotrices presentaron su reporte de ventas correspondiente a marzo y hay malas noticias por lo menos para General Motors, Ford y Toyota.
Las tres empresas presentaron una caída en sus ventas, después de que el año pasado el ramo tuviera ventas récord que llegaron a 17.55 millones de unidades.
GM tuvo una caída de 6%, seguida por Ford con 7.2% y la japonesa Toyota que vendió 4.4% menos unidades en comparación con marzo del año anterior en el mercado más grande del mundo.
Esto podría pegar de refilón a la industria mexicana, que es el principal exportador del sector manufacturero y que en marzo tuvieron un crecimiento de 18.7% en el valor de los envíos al exterior, con todo y depreciación del tipo de cambio. ¡Ouch!
LO FEO
Ahora resulta que para el cierre del año, la inflación se ubicará en 5.67% al cierre del año, en lugar de acabar en 5.56%, esto de acuerdo con la misma encuesta del Banxico.
Los precios de la gasolina fueron el principal detonante de este incremento, pero en fechas recientes también algunos productos como el jitomate, el aguacate y el limón (estos dos últimos están bajo investigación de PROFECO, pues aparentemente no está justificado un repunte de este nivel) también se convirtieron en un hoyito más en el bolsillo.
Además, esto complicaría la labor del Banco de México para controlar el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de cara al cierre de 2018, cuando –se supone- el indicador regresaría a niveles de 3.6%, dentro del objetivo de 3% con una tolerancia de un punto porcentual. En suma, cada vez nos va a alcanzar para comprar menos cosas.