A pesar de que en el primer bimestre de este año se vendieron mil 348 autos eléctricos nuevos, lo que representó un avance anual de 422.5%, según datos de la Asociación mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), este mercado tiene un potencial muy alto y ofrece beneficios que pueden permitir que en el corto plazo aumenten sus colocaciones en el mercado mexicano; sin embargo hay mitos que detienen su crecimiento.
Una de las grandes ventajas, especialmente en temporadas de calor, es que estos vehículos están exentos de los programas Hoy No Circula en la Ciudad de México y el área conurbada, junto con las unidades híbridas.
Sin embargo, Schneider Electric detectó cuatro mitos que inhiben el consumo de estos modelos.
El primero es que no existe la infraestructura necesaria. La empresa detalló que hasta el momento instaló 250 estaciones de recarga en hogares y lugares públicos en la capital del país, estrategia que se realizó en colaboración con organismos gubernamentales y empresas automotoras, para que sea posible encontrar sistemas de recarga en centros comerciales, restaurantes, universidades, supermercados y hasta en el Bosque de Chapultepec.
Una estación de carga lenta permite que la batería del auto se cargue al 50% en tres o cuatro horas, así que después de un paseo por algunos centros comerciales que ofrecen este servicio de forma gratuita, se puede utilizar el auto.
“Incluso algunas oficinas ya instalaron estas estaciones de carga para que durante las jornadas laborales el auto pueda recargarse”, detalló la firma especializada en soluciones energéticas.
El rendimiento de la batería es muy bajo. La empresa señaló que una carga completa permite un rendimiento de hasta 160 kilómetros, lo que equivale a recorrer todo Anillo Periférico tres veces en el mismo día.
Además en casos de congestionamiento vehicular, el auto disminuye el consumo de energía y ahorra carga.
Para las casas, existen cargadores nivel dos que tardan entre siete y ocho horas en cargar la batería completamente.
Mantenimiento caro. Desde el punto de vista de la empresa, “llenar el tanque” de un auto eléctrico cuesta alrededor de 30 pesos, lo que equivaldría a una carga completa, lo que en términos de gasolina Magna para un tanque de 40 litros representa 500 pesos.
Es cierto que la inversión inicial puede ser más alta, pero a largo plazo el gasto se reduce significativamente, al tiempo que tienen la ventaja de estar exentos del pago de tenencia.
Poca variedad de modelos. En la actualidad existen ocho modelos de distintas marcas que son eléctricos como el el Nissan Leaf, el Chevrolet Spark EV y Volt; Toyota Prius; los modelos i3 y el i8 de BMW; Twizy de Renault y los modelos e-Hybrid de Porsche.
Además, en el corto plazo llegarán modelos de Ford y Honda y todos estos vehículos utilizan la misma toma de cargador, por lo que no importa el auto, hay muchas plazas comerciales donde el usuario puede recargar el automóvil.