Esta mañana el peso registra una depreciación de 3 centavos o bien un 0.16% respecto a la jornada de ayer, lo qu sitúa al billete verde en 19.05 pesos a la venta en el mercado interbancario.
La presión se registra porque persiste la especulación de que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) podría adoptar una postura más acomodaticia y recortaría su tasa de interés el 31 de julio.
Además hoy se publicó en Estados Unidos la inflación al productor de junio, la cual se ubicó en una tasa interanual de 1.7%, por debajo del 1.8% en mayo.
El dólar estadounidense se mantuvo estable tras el indicador, pues el mercado ya anticipaba dicho descenso de los precios al productor.
A diferencia de otras divisas emergentes el peso acumula una depreciación semanal de 0.13% o 2.5 centavos debido a que el mercado percibe un mayor riesgo de mantener posiciones a favor de la moneda nacional tras la renuncia de Carlos Urzúa a la Secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Analistas señalan que la ligera debilidad del peso también obedece a la baja de la actividad económica que contribuye con el menor apetito por instrumentos de deuda mexicanos.
Hay que destacar que ayer por la mañana, la minuta de la última reunión de política monetaria de Banco de México (BANXICO) envió la señal al mercado de que podría hacerse un recorte a la tasa de interés de al menos 25 puntos base si en Estados Unidos la FED comienza a recortar su tasa.
Todos los miembros de la Junta de Gobierno de BANXICO señalaron que la desaceleración económica es mayor a la anticipada, con debilidad en los componentes de la demanda agregada interna, es decir, en el consumo, la inversión y el gasto público.
Hay que destacar también que por el lado del sector industrial, las señales apuntan a un desempeño negativo en el segundo trimestre. Esta mañana se publicó la actividad industrial de México correspondiente a mayo, la cual mostró una contracción anual de 3.14%, el octavo mes consecutivo de contracciones y la más pronunciada desde octubre de 2009.
Un reporte de Banco BASE señala que el desempeño mensual también es preocupante, pues luego de una recuperación moderada de 1.4% en abril, en mayo el indicador se contrajo 2.13%, la mayor desde enero de 2009.
Debido a que persiste un contexto de riesgos para México, la posibilidad de que se aprecie la moneda nacional seguirá limitada.
Durante la sesión se espera que el tipo de cambio cotice entre 18.90 y 19.10 pesos por dólar.