La armadora de autos japonesa Nissan cerrará por lo menos dos días a la semana tres de sus plantas de montaje en México, y dos en Estados Unidos, el objetivo es recortar hasta en 20% su producción este año debido a la disminución de las ventas que se han registrado en el vecino país del norte.
De acuerdo con información difundida por el diario económico Nikkei, los empleados no serán despedidos y las líneas de producción no se detendrán por completo.
Asimismo, los proveedores de componentes del fabricante ya han sido informados de este cambio que probablemente impactará temporalmente las ganancias de la empresa.
El fabricante tendría previsto finalizar el reajuste de su producción hacia el tercer trimestre del año, cuando se lanzaría su nuevo sedán Altima, que es uno de sus modelos más vendidos en el mercado estadounidense.
Hay que señalar que Nissan ya redujo su producción en Estados Unidos aproximadamente en 9.2% de abril de 2017 hasta el de marzo de este año.
Además hay que considerar que esta estrategia de Nissan se da en medio de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y la posible imposición de un arancel de hasta el 25% a la importación de vehículos.