Mientras el candidato a la presidencia por la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador volvió a arremeter en contra de la obra de infraestructura más importante del sexenio, esto es el Nuevo Aeropuerto Internacional de México y afirmó que se debe concesionar ahora mismo, el portavoz de Los Pinos, Eduardo Hernández aclaró que se tomó la determinación de “no concesionarlo” porque se trata del aeropuerto más rentable del país.
Ayer Federico Patiño, director del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México a cargo de dicha obra, indicó que sí es viable su concesión, pero una vez que termine la obra y además ello significaría dejarles las utilidades al nuevo dueño y no al gobierno como está planteado el esquema puesto que es autofinanciable en buena medida vía las cuotas por su uso.
Este miércoles AMLO en gira por Jilotepec en el Edomex afirmó categórico ““Sí, pero no concesionarlo hasta que esté terminado. “¡No! ¡Así no tiene sentido! (…) Cómo se los vamos a hacer con dinero del pueblo de México y luego se los vamos a concesionar. ¡Ah, qué vivillos!”.
De esta manera el político que se decanta por remodelar el aeropuerto militar de Santa Lucía, a unos 35 kilómetros de la capital del país, discrepó de las afirmaciones de Patiño.
Entrevistado luego del mitin en Jilotepec López Obrador insistió en su idea de construir dos pistas en la base militar de Santa Lucía, para resolver el problema de saturación del actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Por su parte el Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto defendió su determinación y Hernández, vocero de la Presidencia dijo en rueda de prensa conjunta en Los Pinos con el secretario de Turismo, Enrique de la Madrid, refirió que hacia finales de la década de los 90 se concesionaron varios aeropuertos del país.
Sin embargo, entonces se tomó la decisión de conservar el actual Aeropuerto Internacional Benito Juárez por una razón estratégica: porque es la terminal más rentable, ya que los ingresos que genera son altamente atractivos para el Gobierno mexicano.
“Y, con esa misma óptica, se llevó a cabo la planeación de este nuevo aeropuerto y, en esa misma lógica, por eso el esquema que hoy conocen que fundamentalmente con inversión privada, sin embargo, el gobierno y el Estado mexicano mantiene la altísima rentabilidad que tiene el aeropuerto.”