Aunque Pemex está dando pasos correctos para superar el declive en su producción, la empresa aún no logra darle la vuelta a este problema, además de que continúa con un alto apalancamiento, señalaron analistas de Standard & Poor´s (S&P).
“El tema de la producción siempre ha sido un foco rojo, los campos que opera PEMEX son campos maduros y la tasa de declinación de un campo maduro tiene una tendencia negativa, lo cual afecta los ingresos de la compañía”, dijo Fabiola Ortiz, directora en el área de calificaciones de empresas y analista de Pemex de la firma.
Sin embargo, se prevé que las medidas para aumentar la producción, como los farmouts (asociaciones por las cuales cede los derechos de explotación y producción a otras empresas) tendrán un impacto en el mediano plazo.
Esto permitirá reducir la inversión de capital requerida para las actividades de exploración y así empezar a revertir la declinación que traía la empresa en producción, señaló Marcela Dueñas, directora asociada de la calificadora.
“En el corto plazo vemos que aún no le han podido dar la vuelta realmente, la producción sigue cayendo, los costos de producción de gasolina aumentaron considerablemente, lo cual pega un poco a los márgenes, y en el corto plazo la seguimos viendo bastante apalancada”, destacó.
Además, otro de los principales problemas de Pemex ha sido el flujo negativo, que ha estado financiando a través de la deuda, agregó Dueñas.
La especialista financiera indicó que, aunque da tranquilidad el hecho de que PEMEX tenga resuelta la situación para financiar sus vencimientos de deuda en 2017 y 2018, no se debe dejar de lado que la empresa puede volver a tocar al mercado si ve alguna oportunidad interesante.
En este sentido, Fabiola Ortiz, agregó que el 2018 es un año electoral, y las empresas están tratando de no tener vencimientos importantes para ese año, pero también debe trabajar para 2019 porque presenta vencimientos importantes para entonces.
Respecto del objetivo de PEMEX de lograr el equilibrio financiero en 3 o 4 años, las especialistas señalaron que esto dependerá de que los “farmouts” empiecen a producir y que el gobierno le reduzca la carga fiscal en algunos campos que no son rentables, de lo contrario, sería complicado alcanzar esta meta.