La moneda mexicana y el IPC tuvieron su segundo repunte consecutivo como reacción al resultado positivo de la Ronda 1.4 a pesar de que las noticias financieras provenientes del exterior no fueron halagüeñas.
La confianza inyectada en el país a partir de la colocación de 8 de los 10 campos en aguas profundas del Golfo de México, así como la adjudicación del farm out de Pemex, provocaron que la divisa nacional recuperara 16 centavos frente al dólar en el mercado interbancario, pues el billete verde cerró la sesión en 20.40 pesos.
El peso remó contra corriente, después de que la moneda estadounidense mejoró su posición frente a una canasta de seis monedas, pues el índice dólar alcanzó 100.51 unidades, desde 99.84 enteros reportados el lunes pasado.
En la Bolsa Mexicana de Valores también se reflejó el optimismo derivado de la última licitación de la Ronda Uno. El Indice de Precios y Cotizaciones subió 0.39% y cerró en 45,112 puntos, apoyado también por los resultados positivos en Wall Street.
En Estados Unidos el Departamento de Comercio publicó los resultados de la balanza comercial, donde el déficit en ese país se amplió hasta 42.6 mil millones de dólares en octubre, un incremento de 18% respecto del mes previo.
Según analistas estadounidenses, el riesgo de tener un dólar fuerte es que la brecha comercial se incremente en los últimos dos meses del año, lo que impactaría en las exportaciones y reduciría el impulso económico.
No obstante lo anterior, las bolsas en NY mantuvieron el ritmo creciente y el Dow Jones acabó la jornada en 19,251 unidades al ganar 0.39%, tendencia que también siguió el Nasdaq, cuyo índice aumentó 0.45% hasta 5,333 enteros.
Además, el S&P 500 también marcó un nuevo máximo histórico al ubicarse en 2,212 puntos, es decir 0.34% más que el martes pasado.
*Se esfurma impulso de la OPEP
Después de que los precios internacionales del petróleo aumentaran en cinco jornadas consecutivas, en la sesión de este martes regresaron a la tendencia negativa, pues el mercado terminó de asimilar el anuncio de la reducción en el bombeo de crudo de la OPEP en enero, lo que se supone generará una estabilidad relativa en los precios.
Así, el Brent se ubicó en 54.94 dólares por barril, después del máximo de 18 meses reportado el lunes pasado, mientras que el WTI cayó 1.66%, hasta 50.93 dólares.