La economía mexicana creció 2.5% con cifras desestacionalizadas en el primer trimestre del año, dato que estuvo en línea con las expectativas del mercado, apoyada principalmente por una mayor cantidad de días laborales, debido a que la Semana Santa cayó en abril durante este año.
A pesar de la volatilidad del inicio del año, el Producto Interno Bruto subió a su mayor ritmo desde el tercer trimestre de 2015.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), un sector que arrojó un inesperado avance fue la industria, pues después de tener dos trimestres en negativo logró avanzar 0.2% en cifras originales, impulsado por la recuperación económica de Estados Unidos, pues este país alimenta al sector manufacturero mexicano.
Además, el incremento en la inflación a partir del aumento en los precios de la gasolina no fue factor en el primer trimestre, debido a que el sector terciario, que representa 60% de la economía avanzó a una tasa de 3.7%, lo que representó su mejor momento desde diciembre de 2015.
El ramo agrícola también logró una fuerte expansión de 6.9%, lo que representó su mayor avance en dos años y medio.