Héctor Villarreal, director General del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) dijo que la variación de los precios de las gasolinas del 18 de febrero depende más de factores políticos que de las fluctuaciones internacionales en el valor del barril de petróleo.
Esta perspectiva contradice el principio de la liberalización del mercado, pues de acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) el precio de la gasolina debe depender del mercado y no de razones políticas o fiscales.
El analista señaló que el incremento importante ocurrió en enero y que los ajustes a la baja o al alza a partir del fin de semana serán mínimos pues oscilarían entre cinco y 15 centavos, a menos que el tipo de cambio alcance los 23 pesos por dólar o que el precio del barril de petróleo subiera cinco u ocho dólares, pero la tendencia es que ambas variables se mantengan estables.
Por esta razón Héctor Villareal consideró que Hacienda debe continuar con el programa de apertura de los precios de los combustibles; sin embargo, dado el entorno político, con elecciones en el Estado de México que se realizarán en junio próximo, la dependencia puede optar por seguir con los estímulos.
Incluso puede sorprendernos con una baja de dos centavos y aunque el ajuste sería mínimo, el mensaje sería muy favorable para el Gobierno Federal, comentó.
Héctor Villarreal previó que los ajustes en los próximos tres meses de los precios de las gasolinas y diésel serán marginales y que en caso de que los movimientos sean muy abruptos, quizá Hacienda intervenga para suavizarlos y así calmar los ánimos.
Hay que tomar en cuenta que de acuerdo con analistas los precios el petróleo se mantendrán entre 55 y 60 dólares por barril en 2017, mientras que en las últimas semanas se ubicó en un rango de 52 a 55 dólares.