El encarecimiento de los energéticos provocó que el precio de las importaciones en Estados Unidos aumentara 0.4% durante enero, reveló el Departamento de Trabajo.
Sin embargo, el efecto fue ligeramente compensado por la fortaleza del dólar, situación que mantiene la inflación en un ritmo bajo.
No obstante, el repunte fue mayor al esperado por los analistas consultados por Reuters que pronosticaron un incremento de 0.2%.
Este resultado hizo que en el acumulado del último año hasta enero los precios subieran 3.7%, su mayor expansión desde febrero de 2012, apoyados principalmente por un incremento acumualdo anual de 2% en diciembre.
Por otra parte, los precios de las exportaciones durante diciembre repuntaron 0.4% y acumularon un crecimiento de 2.3% contra el mismo mes del año previo.