Luego de la caída en agosto de 23% en las ventas de Nissan, que en México dirige Mayra González y que es uno de los mayores fabricantes de autos en el país, la Industria Nacional de Autopartes (INA) que preside Oscar Albin prevé un futuro incierto para la proveeduría local de componentes automotrices, dado que el contenido nacional de estos últimos en las unidades que se fabrican en México es de aproximadamente 70%.
Debido a lo anterior se estima un desolador panorama ya que las bajas ventas que se producirían en el sector a finales de año se traducirían en menores ingresos para la industria de autopartes cuyo negocio actualmente asciende a más de 7 mil millones de dólares anuales.
En general las ventas de autos en México sufrieron su tercera caída consecutiva en el año, puesto que en agosto las marcas vendieron 6.5% unidades menos que en el mismo mes del 2016, lo que se interpreta como una señal de que la segunda mitad del año será menos dinámica para la industria automotriz.
Para la INA después de varios años de fuertes subidas, estas cifras marcan ya un cambio de tendencia en el sector automotriz nacional.
Entre los elementos que destacan para la generación de estos resultados se encuentran principalmente el contexto económico; la depreciación del peso contra el dólar y aumentos en precios de las gasolinas.