“Como estadunidenses, debemos asumir este problema (del narcotráfico), es nuestro (...). Como estadunidenses, necesitamos aceptar que nosotros somos el mercado" dijo el secretario de estado de Estados Unidos Rex Tillerson.
Indicó que es necesario implementar un plan para reducir la demanda interna de narcóticos en su país.
Por su parte, el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly, coincidió en que Estados Unidos es "un imán" para las drogas debido a la demanda de muchos adictos, y admitió, de acuerdo con la agencia EFE, que México es quien más sufren el peso de la violencia del crimen organizado.
Destacó que el primer paso para reducir el problema de drogas es hacerle frente a la demanda en Estados Unidos.
Agregó que si los estadounidenses entendieran que consumir drogas trae muertes en México o en Colombia; si entendieran que eso provoca la muerte de periodistas y gente en toda la región, “pero particularmente en México, eso reduciría significativamente la cantidad de drogas" que se consume.
John Kelly reconoció que nunca se llegará a cero consumo de drogas en Estados Unidos, pero se puede reducir la cantidad.