En lo que es la medida de estímulo más grande en la historia moderna el gobierno de Estados Unidos autorizó pagos directos a sus contribuyentes y préstamos a pequeñas empresas, al tiempo que crea un fondo de rescate corporativo por 500 mil millones de dólares.
En el convenio que se cerró hoy miércoles, la admnistración del presidente Donald Trump y los principales demócratas lograron un acuerdo para un paquete de rescate por 2 trillones de dólares.
Después de días de disputas partidistas y regateos a puerta cerrada, los negociadores anunciaron que habían acordado un plan para enviar ayuda a los trabajadores, empresas y hospitales devastados por la pandemia y la interrupción económica que ésta ha causado. Se espera que el Senado apruebe el gigantesco proyecto de ley y lo mande a la Cámara, que también planea actuar rápidamente para enviarlo al presidente Trump para su rápida promulgación.
El alcance del plan era impensable hace sólo dos semanas con el Congreso estadounidense profundamente dividido y sin acuerdos en años para nuevas iniciativas.
"En efecto, este es un nivel de inversión en tiempos de guerra en nuestra nación", dijo el senador Mitch McConnell, republicano de Kentucky y líder de la mayoría en el Senado al anunciar el programa.
Entre los acuerdos se encuentra el enviar mil 200 dólares en pagos directos a los contribuyentes con ingresos de hasta 75 mil al año, ello antes de pasar a los que ganan 99 mil dólares anuales. Ademñas las familias recibirían 500 dólares adicionales por niño, en un intento de crear una red de seguridad para aquellos cuyos trabajos y negocios se vean afectados por la pandemia.
Los legisladores acordaron además una expansión significativa de los beneficios de desempleo que incluye la ampliación del seguro de desempleo en 13 semanas y una mejora de los beneficios de cuatro meses. Ante la insistencia de los demócratas, el programa se amplió para incluir a trabajadores independientes, empleados despedidos y empleados como los conductores de Uber.
El proyecto de ley proporcionará también préstamos garantizados por el gobierno federal disponibles en bancos comunitarios para pequeñas empresas que se comprometen a no despedir a sus trabajadores. Los préstamos estarían disponibles durante un período de emergencia que finaliza el 30 de junio y serían perdonados si el empleador continua pagando su nómina durante la crisis.
Al respecto el senador Marco Rubio, republicano de Florida y presidente del Comité de Pequeñas Empresas y Emprendimiento dijo que “existe un amplio acuerdo general de que las pequeñas empresas en este país no podrán sobrevivir a menos que haya una asistencia extraordinaria” y consideró tambié que el objetivo es mantener a los empleados conectados con sus empleadores, “para que las personas no sólo tengan que quedarse en casa y sentir el estrés de ser despedidos" sino que tengan la incertidumbre de que tendrán un trabajo” al terminar la pandemia.
Se convino además que las empresas en dificultades pueden recibir rescates del gobierno, pero con ciertas condiciones. Los préstamos para éstas provendrían del fondo por 425 mil millones de dólares a cargo de la Reserva Federal, y otros 75 mil millones adicionales que estarían disponibles para préstamos específicos de la industria, incluso para aerolíneas y hoteles.
Presionan a México en OMC para que retrase nuevo etiquetado en alimentos
Bazar
Ago. 12, 2020, 1:35 p.m.