México presentó un saldo negativo entre las exportaciones de crudo y las importaciones de productos petroleros al cierre del tercer trimestre del año en 16 mil 323 millones de dólares.
Lo anterior debido a que se importaron 39 mil 646 millones de dólares en gasolinas, diesel, combustóleo y turbosina, que casi superaron en valor a las importaciones de todo el 2017.
Banco de México (BANXICO) reportó que en la Balanza de Productos Petroleros de enero a septiembre el balance entre las ventas y las compras petroleras al exterior del país se profundizó 23% en comparación con el mismo periodo del 2017 con lo que se puede esperar un déficit récord en materia petrolera en este 2018.
Por su parte, la balanza no petrolera registra un superávit de más de 6 mil 100 millones de dólares al tercer trimestre, monto 50% mayor al registrado en 2017.
Se señala que del total del valor de las importaciones, 35% corresponde a las gasolinas automotrices, cuyo monto ascendió a 14 mil 64 millones de dólares entre enero y septiembre de este año.
Se destaca que el valor de estas importaciones es el mayor del sexenio que está por concluir.
Por lo que hace al valor de las compras de gas licuado de petróleo (LP) aumentaron 34% en un año y se ubicaron en mil 949 millones de dólares.