La posible repatriación de mexicanos indocumentados generaría una presión adicional en las finanzas públicas de algunos estados, pues estas personas carecerían de fuentes de empleo, al tiempo que el ingreso y el gasto público disponible per cáspita caerían, pues se tendrían que dividir entre más habitantes, alertó Kristobal Meléndez Aguilar, experto en Finanzas Públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
De acuerdo con datos del Departamento de Ciudadanía y Servicios Migratorios de Estados Unidos, en ese país radican 35 millones de mexicanos, de los cuales 23 millones nacieron en territorio estadounidense, mientras que 12 son mexicanos por nacimiento.
De este monto, entre tres y cuatro millones son indocumentados y son susceptibles de ser repatriados, en caso de que Donald Trump implemente al 100% su programa migratorio.
Sin embargo, a la administración de Barack Obama, que fue la que más indocumentados deportó, le tomó ocho años repatriar a tres millones de mexicanos sin documentos.
Al tomar como referencia el envío de remesas, la zona que tendría mayores problemas con la repatriación de indocumentados sería la región Centro Occidente, pues recibió casi 40% del total de los envíos de remesas en 2010, e incluye a entidades como Jalisco, Nayarit, Michoacán, así como Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí y Zacatecas.
Sin embargo, los estados que recibirán una mayor cantidad de recursos por parte del gobierno federal son las del centro, pues tienen mayores ingresos a partir del Fondo General de Participaciones, los cuales son mayores en 4% respecto a la zona norte y 11% en comparación con el sur.
Estas entidades también se benefician más por la distribución del gasto público por transferencias, servicios personales y servicios generales.
En segundo lugar se ubica la zona norte, pues su actividad de comercio exterior ayuda a los ingresos públicos y tienen mayor recaudación por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
El analista detalló que Sonora, Baja California Sur y Chihuahua son las entidades federativas que más recursos por habitante recibirán por incentivos al consumo de gasolina en la región, aunque la proporción de hogares con migrantes hacia Estados Unidos no llega a 2% en estas entidades, de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Población.