Conforme a las expectativas el incremento de la inflación durante la primera quincena de octubre se situó en 0.62%, esto como resultado de la reversión de la diversas tarifas del sector público que se vieron afectadas por el terremoto del 19 de septiembre.
Con ello la tasa anual del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se situó en 6.30%, por debajo del 6.35% de septiembre y con la tendencia a la baja que se había proyectado.
Otro factor que incidió en el incremento de la inflación fue la desaparición del subsidio energético de temporada de verano, lo que aumentará la presión sobre los precios energéticos.
El Índice de Precios subyacente registró en el mismo periodo un aumento de 0.21% y la tasa anual se colocó en 4.75% con un incremento de 0.13% de las mercancías y de 0.28% en la misma quincena.
En cuanto a la tasa no subyacente el aumento quincenal fue de 1.86% y el anual de 1.18%. Ayudó el subíndice de productos agropecuarios que bajó 1.52%, mientras que los precios de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno subieron 4.07% quincenal, derivado de la conclusión del subsidio al programa de tarifas eléctricas de la temporada de verano que se aplica en 15 ciudades.
Si bien la mayoría de los analistas estimaban hasta hace algunas semanas que la inflación comenzaría a descender en el último tramo del año, dichas expectativas se han modificado debido al ajuste cambiario de los últimos días, motivado por las dificultades en las negociaciones del TLCAN y el fortalecimiento del dólar.
Los analistas estiman que la inflación anual en octubre se mantendrá en 6.3% y los pronósticos formulados hasta ahora están por verse de continuar un tipo de cambio interbancario en 19.20 pesos por dólar.