Con la asistencia de unos 3 mil diputados de todas las provincias hoy arranca en Pekín la Asamblea Nacional Popular de China en donde se votará la propuesta de abolir de la constitución de ese país el límite de dos mandatos de cinco años que se impone a cada presidente. De esta manera el actual presidente, Xi Jinping, asegura el mantenerse en el poder más allá de 2023.
Técnicamente Xi Jinping ya debería salir del poder con el fin de cumplir con la agenda democrática y ampliar su plan para consolidar a China en una gran potencia a mediados de este siglo.
El anuncio de la reforma constitucional para eliminar el límite de los mandatos presidenciales ha generado muchas críticas en redes sociales, sin embargo éstas han sido borradas por la censura que impera en Internet en China.
Se señala que este tipo de actitudes del gobierno se compara con la dictadura de Corea del Norte, donde la familia Kim gobierna desde hace tres generaciones.
Se señala que a sus 64 años, y tras haber consolidado su poder en el Congreso del Partido Comunista celebrado en octubre, Xi Jinping se convierte en el nuevo Mao de China. Xi Jinping podría gobernar de por vida en caso de que se aprueben los cambios a la constituci.
Se trta de un tema histórico porque, hasta ahora, el régimen chino se había caracterizado por ser una dictadura de liderazgo colectivo que buscaba evitar "las locuras" que se sufrieron durante la época de Mao Zedong a quien se bien se le respeta por el "padre fundador" de la patria, también se le señala como el responsable de grandes tragedias que costaron millones de vidas, como el "Gran Salto Adelante" (1958-62) y la "Revolución Cultural" (1966-76).