El presidente Donald Trump movilizó a sus abogados para impedir la publicación de un libro sobre su primer año en la Casa Blanca. El mandatario afirma que el libro está lleno de mentiras y se basa en fuentes que no existen.
A pesar de que el autor ha dicho que habló con Trump en el transcurso de la escritura del texto, el presidente de la Unión Americana sostuvo que jamás autorizó ningún acceso a la Casa Blanca a Michael Wolff, quien escribió el libro titulado "Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Trump".
Una firma de abogados envió en su nombre una carta de 11 páginas al autor y al editor del libro, conminándolos a suspender su publicación y distribución.
La obra se apoya en unas 200 entrevistas con funcionarios oficiales y muestra una Casa Blanca que está sumergida en una caótica y permanente guerra intestina a lo largo del primer año de gobierno del presidente de Estados Unidos.
Los abogados del presidente apuntan en su carta que "el señor Trump exige que se interrumpa y evite cualquier publicación, divulgación o distribución del libro". No sólo eso, también exigen que los responsables publiquen "una retractación plena y completa así como un pedido de disculpas".
La editora del libro decidió adelantar al viernes el lanzamiento oficial, que originalmente estaba previsto para la semana próxima, a raíz de la "demanda sin precedentes".
La divulgación el pasado miércoles de fragmentos del libro provocó un espectacular rompimiento de Trump con su jefe de estrategia de la Casa Blanca, Steve Bannon, quien incluso fue uno de los coordinadores de su campaña electoral.
En una virulenta nota oficial, Trump afirmó que Bannon había "perdido la razón" desde que fue despedido de la Casa Blanca por filtrar supuestas noticias falsas a la prensa.
Abogados del presidente también enviaron una notificación legal a Bannon, para alertarlo de que podría ser acusado en un proceso criminal por violar un acuerdo de confidencialidad después de haber dejado de trabajar en la Casa Blanca.
De lo más polémico, es que de acuerdo con Wolff, la hija de Trump y su marido, Ivanka Trump, son quienes llevan realmente las riendas de la Casa Blanca y los responsables por las renuncias de Bannon y del primer Jefe de Gabinete, Reince Priebus.