La renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) podría tener dos resultados, el primero de ellos, en caso de que sólo exista una modernización generaría ganancias para todos los involucrados, pero si buscan imponer de forma unilateral aranceles u otras barreras comerciales, sería perjudicial, advierte el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“La incertidumbre en cuanto al carácter y el resultado exactos de las negociaciones ya ha hecho mella en la confianza y podría frenar la inversión a corto plazo”, advirtió el organismo internacional.
En el estudio Perspectiva Económicas para América Latina expuso que si los aranceles de los países integrantes del TLCAN suben a los niveles de trato nación más favorecida de la Organización Mundial del Comercio (OMC), la menor demanda en Estados Unidos por las exportaciones de éstos países causaría inicialmente un deterioro en la balanza comercial, la demanda interna y el crecimiento del PIB real en la región.
Con el tiempo, la balanza comercial de estos países se ajustaría paulatinamente gracias a la disminución de las importaciones y la depreciación de las monedas.
En el mismo sentido, el organismo internacional señala que un mayor proteccionismo comercial a escala mundial podría causar efectos de derrame adicionales a la región a través de una disminución en las exportaciones y de los precios de las materias primas.
En este sentido, abundó que impulsar el comercio intraregional tendrá importantes beneficios de crecimiento para América Latina. Según sus estimados, por cada 10 puntos porcentuales de incremento en comercio intrarregional, el crecimiento per cápita puede aumentar en 32 puntos.
En tanto que, el organismo indica en el capítulo sobre el comercio regional, que si en la renegociación del TLCAN se busca cooperación en aspectos como el comercio electrónico y los servicios financieros, podrían generarse dividendos para todos.