El planteamiento del gobierno de Estados Unidos de aumentar el valor del contenido regional de 62.5% a 70% representaría un incremento en los costos de la industria automotriz en México en el corto plazo, sin embargo, en el mediano y largo plazo será beneficioso pues habría un mayor número de inversiones externas y mano de obra más calificada, de acuerdo con un reporte de Grupo Financiero Monex.
Lo ideal sería que, como en 2002, el cambio se diera de manera gradual, con un plazo para que los productores puedan rediseñar sus planes hacia una cadena de valor más integrada con contenido originario de los miembros del TLCAN, indica el análisis realizado por las analistas Janneth Quiroz y Alessandra Ortiz.
Para las armadoras, esta medida significa retos importantes en el corto plazo ya que tendrían que enfrentar mayores costos por no contar aún con la capacidad y las herramientas para realizar las piezas.
“En el mediano -largo plazo los beneficios de que lleguen un mayor número de inversiones externas y que tengamos mano de obra más calificada, serán claves para que nuestro país y la región de Norteamérica puedan competir con Europa, Asia y Latinoamérica en un sector que presenta innovaciones y retos constantes”, concluyen.
Éste es uno de los temas más álgidos en la negociación para actualizar el TLCAN y se prevé que en la cuarta ronda de conversaciones, que se realizará del 11 al 16 de octubre en la ciudad de Washington, Estados Unidos, se perfile una conclusión sobre el tema.
Como se sabe, el gobierno de Estados Unidos está empeñado en reducir el déficit comercial que tiene ese país con México y Canadá a través de renegociar ciertas cláusulas del TLCAN, entre ellas destaca la relacionada con el contenido regional, ya que argumenta que el contenido estadounidense en manufacturas provenientes de sus socios ha ido disminuyendo en el tiempo y con ello se ha acrecentado el saldo negativo en su balanza comercial.
Con el fin de revertir esta tendencia, ha planteado dos posibilidades en las mesas de renegociación del TLCAN. Una de ellas es la de elevar el contenido regional, como se mencionó, y la otra es que se haga nuevamente la separación del contenido regional al nacional para que se incluyan más productos provenientes de Estados Unidos y reducir así el déficit que tiene con México, sin embargo, esta posibilidad entorpecería los procesos productivos, consideran las analistas de Monex.