El exdirector de Petróleos Mexicanos, (PEMEX), Emilio Lozoya calificó las acusaciones en su contra como “un ataque político cobarde y sin fundamentos” contra él y su familia.
Lozoya, quien actualmente es buscado a nivel mundial por la Interpol, contestó a través de su abogado Javier Coello un cuestionario de nueve preguntas que le hicieron llegar el diario alemán Süddeutsche Zeitung como parte de una investigación periodística realizada en conjunto con el medio Quinto Elemento Lab.
Se dio a conocer que Coello entregó las respuestas el sábado 27 de julio, es decir tres días después de la captura de Gilda Austin, madre de Lozoya, en una pequeña isla al norte de Alemania.
Lozoya señaló que “a mi madre se le acusa de que haya recibido dinero de alguna cuenta mía antes de que yo fuera funcionario público, ¿qué clase de delito es ese?”.
El exdirector de PEMEX es acusado en México por asociación delictuosa y realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita y cohecho ligados con la empresa Odebrecht.
Hay que añadir que Süddeutsche Zeitung, Tamedia y Quinto Elemento publicaron que Lozoya y su familia tienen intereses empresariales y financieros en Alemania y Suiza, y las autoridades europeas ya inician las investigaciones pertinentes.
En respuesta a las preguntas, Lozoya afirmó que se trata de un "ataque político cobarde y sin fundamentos contra mí y mi familia, en ningún momento como funcionario público ni yo ni mi familia recibimos dinero alguno de empresas o personas, de tal forma que niego cualquier acusación de corrupción".
En la investigación periodística se le cuestiona a Lozoya “¿Es correcto que a partir de 2016 participó en dos empresas registradas en la misma dirección en Múnich, ELMO Wolfsburg GmbH y ALL-Me Hamburg GmbH? ¿Cuáles fueron las razones para participar en estas dos empresas?
El exfuncionario señaló al respecto "que las inversiones en las empresas que se mencionan son inversiones inmobiliarias que fueron declaradas ante la Secretaría de la Función Pública cada año, mientras fui funcionario público. Todas producto de mi trabajo empresarial antes de ser funcionario público".
Otra de las preguntas fue que “en diciembre de 2016, tres entonces altos funcionarios de la empresa brasileña Odebrecht confesaron a la justicia brasileña que le sobornaron entre 2012 y 2014 con pagos por un total de 10.5 millones de dólares utilizando empresas offshore con cuentas bancarias en paraísos fiscales. Como contrapartida, dicen que usted les ayudó a consolidarse en México y ganar contratos con PEMEX”. ¿Es verdad lo que confesaron? ¿Usted quiere comentar o corregir algo?
Ante esta interrogante Emilio Lozoya señaló que “he negado categóricamente los supuestos dichos de los brasileños. A cambio de sentencias reducidas pueden haber inventado lo que les convenía. Por motivos profesionales los conocí, como a las principales empresas de la región, antes de ser funcionario público".
Una de las preguntas que destacan es que la justicia mexicana le acusa de que como director de PEMEX compró una planta de fertilizantes a sobreprecio. Al respecto Javier Coello señaló que la acusación sobre el sobreprecio no tiene sustento. “Mi cliente nunca participó en los comités de aprobación de dicha transacción, ya que anualmente representaba menos del 1% del monto total a invertir”.
Emilio Lozoya señaló que desde que salió de PEMEX, “mis sucesores y la actual administración han propiciado una caída de más de 30% en la producción de gas en el país por decisiones propias y erróneas e intentar culpar a alguien cuatro años después es absurdo".
Lozoya señaló que su casa en la Ciudad de México se compró en noviembre de 2012, un mes antes de ser funcionario público. ¿Cómo se puede acusar de sobornos a una persona que no es funcionario público? Todo el dinero que se usó para la compra de dicho inmueble es producto de actividad empresarial de años de trabajo antes de ser funcionario público.