Aunque la Cámara de Senadores de Estados Unidos dio el visto bueno al presupuesto federal de ese país por más de 4 billones de dólares para el año fiscal 2018, aún falta la aprobación definitiva que saldrá de las conversaciones entre Diputados y Senadores para llegar a un acuerdo común.
De lo que se trata es llegar a un acuerdo antes de Navidad, como lo sugiere el presidente Donald Trump.
Ambas cámaras tienen propuestas semejantes salvo el tema que incluye un nuevo techo de deuda para Estados Unidos, lo que llevaría a que el presupuesto aprobado se pudiera extender hasta el próximo año.
La aprobación de este presupuesto abre el camino para que el partido Republicano pueda aprobar la ansiada fiscal del presidente Trump por simple mayoría de votos.
Trump ha visto con beneplácito el rumbo que está tomando la aprobación del presupuesto para favorecer el crecimiento y los empleos en ese país a través de la Reforma Fiscal que considera una reducción del Impuesto a Sociedades de 35% a 20% desde 2019
A pesar de todo, analistas señalan que los recortes de impuestos no estimularán suficientemente el crecimiento económico. Tanto el proyecto del Senado como uno aprobado este mes por la Cámara de Representantes reducirían en, aproximadamente, 1,4 billones de dólares la recaudación federal en el transcurso de diez años, según el Comité Conjunto de Impuestos (JCT, por sus siglas en inglés).
Toda esta situación es por demás polémica pues también el presupuesto intenta derogar la obligación establecida por el Obamacare de que los residentes de Estados Unidos obtengan un seguro de salud.