Aunque la economía global ha continuado con su deterioro en este 2022, lo cierto es que no lo ha hecho tan severamente como los economistas temían anteriormente, lo que aumenta la posibilidad de que el mundo pueda evitar una profunda recesión el próximo año, esto de acuerdo con los resultados de las encuestas empresariales dadas a conocer este miércoles.
De hecho Adam Posen del Instituto Petersen de Economía Internacional dijo que tanto EU como Europa“probablemente tengan recesiones relativamente cortas, no terribles, y vuelvan al crecimiento quizá ya en el cuarto trimestre de 2023”.
Y es que las caídas tanto en la producción tanto de EU como de Europa en noviembre fueron ligeramente inferiores a los pronósticos. Aún así apuntan hacia una perspectiva mixta con algunas partes de ambas economías que muestran resistencia a pesar de la alta inflación y el aumento de las tasas de interés.
Además en China, la segunda economía más grande del mundo, el panorama es muy incierto ya que el país enfrenta un aumento en los casos de COVID-19. Los economistas esperan un repunte en el crecimiento el próximo año a medida que Beijing intenta suavizar las duras políticas contra la pandemia.
De acuerdo con expertos, el mercado laboral de EU ajustado y los balances de los hogares que son todavía sólidos han dado respaldo al gasto de los consumidores, el principal motor de la economía del vecino país del norte.
Destacan que un consumo saludable ha ayudado a impulsar las ventas minoristas de octubre y podría mantener el crecimiento de la economía más grande del mundo a fines de este año. De hecho subrayan que la perspectiva depende en parte de cómo resista los aumentos de las tasas de interés de la Reserva Federal destinados a enfriar la inflación que se acerca a un máximo de 40 años.
Por lo que hace a Europa experimenta menos perturbaciones económicas por la decisión de Rusia de limitar el suministro de energía de lo que temían los analistas. Muchos hogares y empresas de la región se han adaptado vía la reducción de su consumo de energía. El presidente del Instituto Peterson de Economía Internacional, Adam Posen ha señalado que los gobiernos europeos también distribuyeron sumas de apoyo fiscal mayores a las previstas a los hogares para ayudar a abordar el aumento de los costos de la energía y los alimentos, lo que ha brindado un soporte importante.
Agregó que por fortuna se terminará el año con más del 75% de la economìa mundial con un buen funcionamiento y consideró que EU y la Unión Europea “probablemente tengan recesiones relativamente cortas, no terribles, y vuelvan al crecimiento quizá ya en el cuarto trimestre de 2023”.
No obstante, David Malpass, director del Banco Mundial, dijo que muchos países en desarrollo se han quedado atrás, y advitió que por ello enfrentan un riesgo económico adicional: las políticas adoptadas por las economías avanzadas para abordar la inflación y la desaceleración económica podrían dejar capital insuficiente para las naciones más pobres.