Standard & Poor’s mejoró la calificación a escala global de Cemex de “B+” a “BB-“ con perspectiva estable, debido a que la empresa logró una mejora en su situación financiera, así como por una disminución sostenible de su deuda.
De acuerdo con la calificadora, en los últimos dos años la empresa de Rogelio Zambrano mantuvo su compromiso con la reducción del apalancamiento en su estructura de capital y con la mejora de los indicadores de protección con relación al endeudamiento para fortalecer su perfil de riesgo financiero.
Además, detalló que las dificultades derivadas del fortalecimiento del dólar generaron una recuperación más lenta de lo esperado de los indicadores crediticios de la empresa debido a la volatilidad del tipo de cambio que afectó el flujo operativo, así como por su exposición a la deuda denominada en dólares.
Pese a estas complicaciones la empresa implementó con éxito un plan de venta de activos que ayudó a que obtuviera efectivo adicional para pagar los créditos pendientes.
Con estas acciones, la calificadora de riesgo espera que la relación del índice de deuda con el flujo operativo se mantenga por debajo de 5.0 veces, estimado para el cierre de 2016.
“El alza de las calificaciones refleja la trayectoria sostenible de reducción de apalancamiento de la empresa gracias a la ya anunciada venta de activos y a las expectativas positivas de generación de flujo de efectivo”, añadió.
Sobre la perspectiva estable, S&P aseguró que este indicador responde a la percepción de que el equipo administrativo mantendrá su compromiso con la disminución del apalancamiento, lo que permitirá llevar la relación deuda-flujo operativo a niveles inferiores a 5.0 veces.
La calificadora pronosticó que el flujo de efectivo de mil millones de dólares en 2017 que obtendrá a partir de la oferta de venta de hasta 23% de Cementos Chihuahua, serían utilizados para pagar sus adeudos.