El secretario de Economía de México, Idelfonso Guajardo, llegó este lunes a Bruselas, en un intento por terminar la modernización del acuerdo bilateral entre México y la Unión Europea (UE) antes del final del año, dado el plazo que acordaron ambas partes.
El reconocimiento de las denominaciones de origen de los quesos europeos es uno de los principales puntos que se deberá aclarar en la reunión que mantendrá Guajardo mañana con la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmtröm.
La UE quiere prohibir a los productores mexicanos comercializar sus quesos con nombres como manchego, camembert o parmesano, indicaciones geográficas protegidas en la mancomunidad.
Se trata de una gran controversia. El reconocimiento de la denominación de origen debe ser aceptada y respetada en distintos países a partir del registro que tienen las naciones sobre productos que solamente se pueden generar en ellos.
Ese es el caso por ejemplo del Tequila; el Mezcal; el Bacanora; el Mango Ataulfo, en el caso de México, pero hay otras como el coñac de Francia, entre muchas otras.
De acuerdo con las reglas europeas, para ser vendido con uno de esos nombres, el queso debe haber sido producido en la región correspondiente a su nombre, según los métodos específicos reconocidos.
México trata de obtener de la UE una concesión para que al menos cinco quesos comerciales producidos aquí, puedan mantener su nombre actual. Otros temas que quedan pendientes son el acceso a mercados en temas agrícolas y el modelo del sistema de protección de inversiones que las dos partes quieren implementar.