El banco de inversión suizo UBS, afirmó que la eventual cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) haría que las aerolíneas busquen alternativas en otros aeropuertos como el de Toluca principalmente, además de los de Guadalajara, Monterrey y Tijuana.
La firma financiera sostiene en un análisis que la demanda en el NAIM crecerá a un ritmo de entre 4% y 5% anual hasta el 2022 cuando será ya insuficiente.
Es entonces cuando se generará un “cuello de botella”, si no se tienen nuevas instalaciones.
Esto llevaría a impactar la conectividad aérea del país porque es la instalación aérea en la Ciudad de México, es el principal punto de conexión con el resto los aeropuertos de México.
El actual aeropuerto movilizó el año pasado 44.7 millones de pasajeros y 537 mil 262 toneladas de carga, por lo que ya está totalmente a su límite.
UBS refirió que la terminal de Toluca podría atender la creciente demanda de tráfico aéreo debido a que está a 40 minutos de la zona financiera de Santa Fe, está subutilizado, pero es técnicamente operable.
“Bajo este supuesto, la demanda insatisfecha también sería atendida por el Aeropuerto Internacional de Toluca, mismo que fungiría de terminal 3 del AICM y sería un soporte y desahogo de operaciones de este último debido a su capacidad excedente y la cercanía con la Zona Metropolitana del Valle de México, para lo cual se requerirían ciertas inversiones adicionales”, explicó la firma financiera.
Para UBS, el avance 31% que ya tiene la construcción del NAIM, sería un factor positivo en la consulta pública que ha planteado el equipo de AMLO para tomar la decisión de seguir o cancelar la obra.